El Checker® de rango medio de amoníaco de Hanna cierra la brecha entre los kits de pruebas químicas simples y la instrumentación profesional. Los kits de pruebas químicas tienen una precisión y resolución limitadas, ya que dependen del ojo humano para discernir las diferencias de color. La instrumentación profesional incorpora una fuente de luz, como una lámpara LED o de tungsteno, con un filtro y un detector de detección de luz para determinar con precisión la absorbancia y la concentración de iones. La instrumentación profesional ofrece mayor resolución y precisión, pero puede costar cientos de dólares. El Checker® de rango medio de amoníaco de Hanna utiliza un LED de longitud de onda fija y un fotodetector de silicio para proporcionar la precisión de la instrumentación profesional al precio asequible de un kit de prueba química.
- Diseño compacto y portátil
- Temporizador incorporado
- Operación con un solo botón